Las úlceras isquémicas, o ulceras vasculares, pueden producirse por cualquier interrupción del suministro de sangre arterial a un área de la piel.
Generalmente se desarrollan en las piernas y los pies, con frecuencia en los talones, en los dedos de los pies o entre los dedos de los pies, en un paciente con enfermedad vascular, y en los tobillos, pero pueden aparecer también en brazos y manos.
El tabaquismo excesivo y la diabetes son los principales factores desencadenantes de las ulceras isquémicas, por lo que es muy importante la educación sanitaria y la prevención.
Síntomas:
- Llagas rojas, amarillas, grises o de color negro oscuro.
- Bordes o filos elevados alrededor de la herida (parecen perforados).
- No hay sangrado.
- Herida profunda a través de la cual se pueden mostrar los tendones.
- La piel en la pierna aparece brillante, firme, seca y sin vello.
- Estirar la pierna a un lado de la cama o una silla hace que la pierna a se ponga de color rojo.
- Cuando se levanta la pierna, resulta pálida y fría al tacto.
- Dolor en las piernas, a menudo por la noche. El dolor puede desaparecer cuando la pierna se pone hacia abajo.
- La ulcera puede o no puede ser dolorosa.
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La medicina hiperbárica permite vascularizar las heridas y ayudar a su cicatrización, debido a que frena la hipoxia de los miembros y produce colágeno y fibroblastos, lo que acelera el proceso de cicatrización.
Barox Chile.
